Para mí uno de los lugares más bellos en el mundo es la selva. Yo he estado en Yucatán, México y en el Parque Oncol cerca de Valdivia, Chile. Durante esos paseos por la naturaleza abundante me enamoré de la selva, los diferentes tonos de verde y marrón que te dan tranquilidad, los cantos de los pájaros, el silencio, los olores frescos y de musgos. En fin, me gusta la selva, será porque nací en un pueblecito que se llama Grünwald (bosque verde).
Ulrike
Yo también me enamoré del sur de Chile, sobre todo de una isla que se llama Chiloé, y que es otro mundo.